HISTORIA DE LA CONVENCIÓN
La Convención es el resultado de esfuerzos conjuntos e incansables de Estados, asociaciones de víctimas, organizaciones no gubernamentales de derechos humanos y expertos.
Desarrollada sobre la base de la Declaración de 1992, la Convención representa un hito en la larga lucha contra las desapariciones forzadas. La Convención es el primer instrumento jurídicamente vinculante adoptado por el entonces recién creado Consejo de Derechos Humanos en su primera resolución del 29 de junio de 2006. Posteriormente, la Convención fue adoptada por la Asamblea General (AGNU) en su resolución 61/177 del 20 de diciembre de 2006 y entró en vigor el 23 de diciembre de 2010.
El objetivo de la adhesión universal es recordado sistemáticamente por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución bienal sobre la Convención (más reciente: A/RES/76/158).